si soy fonasa

Si eres residente en España y trabajas por cuenta propia o ajena, estás obligado a realizar la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) todos los años. Este impuesto grava la renta obtenida por los contribuyentes y es un pilar fundamental del sistema fiscal español.

Ser «fonasa» implica que tu actividad está incluida en el ámbito de aplicación de la Seguridad Social y, por tanto, debes cotizar a la misma a través de la cooperativa. A cambio, tienes acceso a los mismos derechos y prestaciones que un trabajador autónomo, como la cobertura por incapacidad temporal, maternidad o jubilación.

En cuanto al pago del IRPF, como «fonasa» estarás sujeto al régimen de pagos fraccionados, por lo que deberás realizar adelantos trimestrales del importe que te corresponda para evitar un posible recargo por ingreso fuera de plazo. Estos pagos se calculan en función de tus ingresos y gastos del trimestre anterior, por lo que es importante llevar una correcta gestión y registro de todas tus transacciones.